El incremento a las tarifas eléctricas de uso industrial, comercial y doméstico, que anunció la Comisión Federal de Electricidad (CFE) hace casi un mes, es una muestra de la ineficiencia e ineficacia de la Reforma Energética promovida por el Gobierno Federal, al grado de que se vio obligado a reconocer que existe un aumento de las presiones inflacionarias sobre los precios al consumidor, coincidieron los diputados Delfina Gómez Álvarez y Virgilio Caballero Pedraza. “Si bien el entonces titular de la CFE, Enrique Ochoa Reza, apuntó que las tarifas domésticas de ‘bajo consumo’ no aumentarían, lo cierto es que dejó mucha incertidumbre acerca de lo que significa ese nivel de utilización del fluido eléctrico y las perspectivas que se tienen en este servicio para las familias, que representan 88.6 por ciento de los clientes de la empresa que atiende a 39 millones de usuarios”, señalaron. En ese sentido, hicieron un llamado a la CFE y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para que garanticen que las facilidades otorgadas a las empresas generadoras privadas, así como la reducción de costos laborales a ese organismo, se traduzcan en beneficios para los consumidores domésticos de electricidad y no incrementen las tarifas para los hogares. A través de un Punto de Acuerdo presentado a la Comisión Permanente, la integrante y el Vicecoordinador de la bancada de Morena precisaron que el propósito es no afectar a millones de familias mexicanas en el contexto de incertidumbre económica que padece nuestro país. “Es un tema de gran importancia para la población que sufre por las altas tarifas eléctricas y cobros excesivos, que no tienen ninguna explicación, y ante lo cual el hoy ex director de la CFE, Enrique Ochoa Reza, no tuvo otra respuesta que elogiar a la Reforma Energética y acusar a los usuarios de pertenecer a la ‘cultura del no pago’, sin reconocer que esos cobros no corresponden a los niveles de consumo de la población”. Gómez Álvarez y Caballero Pedraza también solicitaron a la Comisión Permanente que se lleve a cabo una mesa de trabajo con quien asuma la Dirección General de la CFE, con el fin de analizar la sostenibilidad de las tarifas eléctricas y los riesgos que existen como consecuencia de la recuperación internacional de los precios del gas, la devaluación del peso, la reducción de los recursos presupuestales, y la utilidad de productores y distribuidores privados. “En el país se han generado nuevos riesgos, como depender de materias primas importadas, a lo que se agrega la incertidumbre en la capacidad de frenar las presiones inflacionarias y a qué costo, y peor aún, cómo harán para evitar alzas de tarifas, si la estrategia impulsada por este Gobierno se basa en garantizar la utilidad de las empresas”. /gh/m |