MonitorMVS1025
6:46  |  21 - 11 - 2014
Polémica por la casa blanca enfrenta a diputados y revienta sesión en San Lázaro

En la Cámara de Diputados, los temas de las protestas por el caso Ayotzinapa, la polémica sobre la casa de la esposa del Presidente de la República en Las Lomas, el ambiente de crispación social en el país, se mezclaron hasta reventar la sesión ordinaria de éste jueves 20 de noviembre.

 

Los ánimos se calentaron en San Lázaro, cuando al subir a la Tribuna, la diputada de Movimiento Ciudadano (MC), Luisa Alcalde refirió al tema de la propiedad de la señora Angélica Rivera y demandó investigar el posible conflicto de intereses, en el que estaría involucrado el contratista Juan Armando Hinojosa al que se refirió como “el consentido” del Gobierno Federal.

 

Aunque el tema a discusión era un dictamen de reforma a la Ley General de Educación, la atención se centró en los sucesos registrados en Iguala, Guerrero y la casa de la esposa del Primer Mandatario.

 

Las referencias de los congresistas de izquierda a ese tema, comenzaron a enervar a priistas y verdes, que desde sus curules, solicitaban apegarse al orden del día, que debía haber incluido un apartado de agenda política, pero solo para referir al aniversario de la Revolución.

 

“Yo quisiera que tuviéramos respeto del espacio que ocupamos aquí y que si tenemos que hacer declaraciones de cualquier integrante de la farándula, del mundo del espectáculo que no es servidor público, las hagamos en el TV Notas”, dijo la diputada del PRI, Angelina Carreño, en una fallida defensa de la señora Angélica Rivera.

 

Justo cuando los diputados emitían su voto por el dictamen previamente discutido, un grupo de congresistas de izquierda subió a la Tribuna a colocar una manta con la frase: “EPN Renuncia ya, Ayotzinapa vive”.

 

Entre los manifestantes estaban las perredistas Socorro Ceseñas y Claudia Bojórquez, los petistas Manuel Huerta, Arturo López Cándido y Loretta Ortiz; así como los diputados y diputadas de Movimiento Ciudadano (MC): Aida Valencia, Loretta Ortiz, Gerardo Villanueva, Juan Luis Martínez y Alfonso Durazo.

 

El discurso de la diputada Alcalde Luján sobre la “casa blanca” y la exigencia de renuncia al Primer Mandatario, terminó de encender a los legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido Verde Ecologista (PVEM).

 

A empellones para desplazar a quienes ya estaban en la Tribuna, verdes y priistas desplegaron su propia manta con la leyenda: “AMLO=MAZÓN=ABARCA=INVESTIGACIÓN”.

 

También exhibieron una de las fotografías en las que el ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador aparece abrazando al alcalde de Iguala con licencia y a su esposa, identificados por la Procuraduría General de la República (PGR) como autores intelectuales del ataque a los normalistas de Ayotzinapa.

 

“Mentiroso, Abarca-Obrador, Abarca-Obrador, la doble moral. Ya bájense, Abarca-Obrador, Abarca Obrador”, gritaba el diputado del PRI, Isidro Moreno”.

 

“Ya renuncien, les dijo (Cuauhtémoc) Cárdenas”, complementó su compañero Abel Salgado.

 

Quienes por el PRI entraron a la “guerra de mantas”, aunque en todo momento intentaban esconderse detrás de la suya, fueron los diputados César Reynaldo Navarro de Alba, Roy Argel Gómez Olguín; así como las diputadas del Verde, Mónica García de la Fuente y Carla Alicia Padilla Ramos, última que sostenía la fotografía de López Obrador con Abarca Velázquez.

 

Entre los priistas que perdieron el control y mostraron su ira, estuvieron el ya mencionado diputado Isidro Moreno y el jalisciense Leobardo Alcalá.

 

A la gritería y lanzamiento de acusaciones también entró el líder del Verde, Arturo Escobar, que presuroso, fue a encarar a los de izquierda.

 

En medio de la guerra de mantas, los Del PRD, MC y PT llamaban “porros” a los del PRI y el Verde.

 

“Arturo, Arturo, no seas porro, no seas porro”, le dijo el diputado Villanueva Albarrán. “Asesinos”, le reviró Escobar y Vega.

 

Las diputadas también participaron en el intercambio de insultos. Desde su curul, la priista María Carmen López Segura seguía gritando: “asesinos, asesinos”.

 

Las perredistas Socorro Ceseñas, Claudia Bojórquez y la diputada de MC, Martha Beatriz Córdova, que permanecían en la Tribuna intentando que los priistas no les arrancaran su manta ni las obligaran a bajar del lugar, se hicieron de palabras y compartieron fuertes insultos con diputadas priistas como Laura Barrera, que les dijo “pendejas”, “chachas” y “sirvientas”.

 

“Tú me das pena, tú, tú. Pena les debería de dar que no hacen las cosas como debe de ser. Defender lo indefendible, se les está convirtiendo la cara de Díaz Ordaz”, recriminó Ceseñas a quien le dijo “pendeja”.

 

“¡Ahora resulta que somos sirvientas y chachas!”, agregó la diputada Córdova Bernal.

 

“¿Quién dijo?”, inquirió Socorro Ceseñas.

 

“Las faranduleras éstas. ¿Ellas qué son, unas faranduleras defiende-gaviotas?”, cuestionó la diputada Córdova, en referencia al sobrenombre artístico de la esposa del Primer Mandatario.

 

Del hecho dio fe el vocero de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN), Juan Pablo Adame, que en su cuenta de Twitter, detalló la escena.

 

“Se llevan pesado aquí las diputadas: Laura Barrera (PRI): eres una pendeja. Socorro Ceseñas (PRD): tú eres la pendeja”, escribió en su cuenta @JuanPabloAdame.

 

Luego, la diputada Barrera Fortoul intentó negar sus dichos, al afirmar que nunca ha insultado a nadie y tiene la instrucción de respetar el reglamento de la Cámara. “Nunca agredí a una diputada, jamás mencioné lo que ellas hacen referencia. Lamento muchísima esta circunstancia y jamás en mi vida he insultado y jamás insultaré a nadie”.

 

Sin embargo, el diputado Adame Alemán ya había tuiteado el ríspido intercambio de la priista contra la perredista, y viceversa.

 

Al considerar que no había condiciones para continuar con los trabajos, el presidente de la Mesa Directiva en turno, Tomás Torres, provocó más la ira de los congresistas que querían hablar de la “casa blanca” y el presunto conflicto de intereses entre la Presidencia y los constructores del inmueble, al ordenar el fin de la sesión.

 

Pese a que la campanilla sonó a las 13:02 horas de la tarde, los gritos desde la Tribuna y la parte baja de la misma continuaron durante algunos minutos.

 

Como conclusión, el diputado por el PT, Manuel Huerta, prefirió ver el lado positivo y hasta felicitó al diputado Torres Mercado, por haber terminado la sesión.

 

“El presidente de la Mesa Directiva del día de hoy, sumó a la Cámara de Diputados al paro cívico nacional que millones de mexicanos y mexicanas están haciendo, esto se le debe agradecer al diputado Torres Mercado”, ironizó Huerta Ladrón de Guevara.

 

Molesto con la situación y en medio de una nube de reporteros, camarógrafos y fotógrafos, el coordinador parlamentario del PRI, Manlio Fabio Beltrones, discutió brevemente con el diputado del PRD, Fernando Belaunzarán.

 

“Vamos a ordenar el debate político y el debate político en un parlamento, se hace con agenda política, no se hace con este tipo de acciones que son impropias de la política. La política se ordena, si no, es la antipolítica”, dijo Beltrones Rivera.

 

“Casi no podemos hablar de nada, porque estamos amarrados, y no quiero justificar lo que acabamos de ver, sin justificar lo que acabamos de ver”, respondió Belaunzarán Méndez.

 

“Fernando, de manera muy respetuosa, de manera muy respetuosa, si, no puedes justificar lo que acabas de ver”, reviró el líder del tricolor.

 

Luego vinieron más pronunciamientos de las fracciones parlamentarias.

 

Los panistas se limitaron a lamentar que el debate haya quedado en segundo plano, frente a la confrontación entre el PRI y el Verde y las fracciones de izquierda.

 

El coordinador perredista, Miguel Alonso, recriminó que el PRI, por segunda vez en la semana, bloqueara el debate sobre el conflicto de intereses del Presidente y su esposa, con los constructores de su mansión, que también son contratistas del Gobierno Federal.

 

“Lo que no se debe hacer es cancelar las sesiones y prácticamente cancelar la discusión de la agenda y la obligación que tenemos de desahogarla, simplemente por evitar que se discuta o que se toquen determinados temas en la Tribuna”, reclamó el diputado Alonso Raya, que aseveró que había un acuerdo para hablar en el apartado de agenda política, sobre la Revolución y sobre los temas de coyuntura, como la casa de la familia presidencial.

 

La vicecoordinadora de contenidos del PT, Lilia Aguilar, fue tajante al acusar que el PRI y el Verde maniobraron para llevar a cabo el “montaje” de las mantas y su confrontación con el PRD, con tal de reventar la sesión y que no se hablara de las propiedades y el patrimonio del Primer Mandatario y su esposa.

 

“El diputado Tomás Torres, que no podía declarar que había ninguna actividad violenta ni mucho menos, espera a que diputados de alguna bancada lleguen y le griten a los diputados que sostenían la manta y entonces alegar que había violencia, cuando no hubo tal. Ellos, es decir, crearon este montaje para acabar con la discusión”, lamentó Aguilar Gil.

 

El vicecoordinador del MC, Ricardo Mejía, también fue muy directo al acusar que el Ejecutivo Federal, ordenó a los legisladores más recalcitrantes del PRI y el Verde provocar el fin de la sesión.

 

“El grupo del Estado de México ya tomó el control de la coordinación del PRI, esa es la realidad. Entonces viene la línea dura: el Presidente de la República se siente acorralado y ya soltó a sus perros, digo, hay que decirlo claramente: que van a boicotear el trabajo legislativo cuando se trate de temas que afecten la imagen presidencial”, advirtió Mejía Berdeja.

 

Por la bancada priista, el vicecoordinador Manuel Añorve salió a acusar de “anti-políticos” a los congresistas de izquierda, a quienes señaló por contar “verdades a medias” y mentir abiertamente.

 

Tras aseverar que el tricolor no rehúye a ningún debate, el diputado Añorve Baños tachó de “provocadores” a quienes subieron la manta con la exigencia de renuncia al Presidente e incluso manifestó que tratan de “secuestrar” la bandera del caso Ayotzinapa, para incitar al encono.

 

Cuestionado sobre por qué los legisladores del PRI incurrieron en las mismas prácticas, al sacar su manta con señalamientos hacia López Obrador, gritarles asesinos a los de izquierda e insultar a las legisladoras llamándolas “chachas y sirvientas”, el vicecoordinador del PRI justificó el hecho, al señalar que sus compañeros de bancada se limitaron a responder a provocaciones.

 

“Que nadie ordenó, menos el coordinador Beltrones o su servidor, que se subiera una segunda manta. A mí me gustaría saber quién ordenó que se subiera la primera manta provocadora y obviamente llena de calumnias”, indicó, no sin antes solicitar a la prensa que también preguntara a los diputados de izquierda sobre quién les ordenó exigir la renuncia del Presidente con una manta.

 

“Decirle que con mucho gusto vamos a checar quién fue quién subió la manta, porque no tenemos más información que lo que vimos ahí en Tribuna, pero por supuesto que es una reacción a la provocación”, argumentó, en descargo de sus compañeros de partido que aunque se esforzaban en esconderse tras la manta, fueron plenamente identificados. ys/m.