Para tener una mejor comunicación con quienes viven o padecen alguna discapacidad es necesario interactuar de acuerdo a cada limitación, ya sea física o mental, planteó la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables de la Cámara de Diputados.

Al ofrecer una serie recomendaciones, la instancia legislativa sugirió que en el caso de quienes enfrentan discapacidad auditiva, es preferible acercarse y tocarlos del hombro o brazo para atraer su atención; mantener en todo momento el contacto visual con la persona, aunque cuente con traductor, apoyarse en la escritura y hablar con naturalidad, expresivamente y a un ritmo normal.

En el caso de las personas con discapacidad visual, expuso la importancia de identificarse antes de hacer contacto físico; avisarle de algunas acciones, como cuando el interlocutor se va a retirar del lugar, y precisar si hay otras personas alrededor.

Para el respeto de la autonomía y decisiones de estas personas es importante preguntar de antemano si requieren ayuda y de ser el caso, ofrecer el brazo u hombro como un apoyo, guiar sus manos al pasamanos, sillas o paredes, mientras que para el manejo de documentos es necesario leerles y describirles el contenido visual.

Respecto a los perros guía, la comisión de diputados destacó que se debe evitar tocarlos, a reserva de que la persona con discapacidad visual dé su permiso, además de que tampoco se debe distraer al animal al decir su nombre u ofrecerle comida.

Para el trato a quienes padecen una discapacidad mental, subrayó la necesidad de eliminar los estereotipos, actitudes estigmatizantes y discriminatorias, además de brindar un trato amable, paciente y respetuoso.

Se debe considerar, apuntó, que algunas de estas personas pueden tener comportamientos o emitir comentarios inapropiados, por lo que la paciencia y la tolerancia resultan de gran ayuda durante las crisis emocionales.

En cuanto a quienes sufren una discapacidad intelectual, recomendó utilizar un lenguaje sencillo; usar frases directas, completas y bien construidas, y respetar los tiempos de asimilación y respuesta de estas personas.

En caso de ser necesario, resaltó la relevancia de reformular el mensaje y mantener un trato de acuerdo a la edad cronológica de la persona, sin llegar al uso de un lenguaje infantil./gh/m