Nota N°. 7199 | Afirma Esquivel Hernández que recursos para atender trastornos y enfermedades mentales son insuficientes; destaca necesidad de incrementarlos en el PEF 2018 |
Palacio Legislativo 23-06-2017 (Notilegis).- La diputada Olga María Esquivel Hernández (PRI), secretaria de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, aseveró que los recursos para la atención de personas con trastornos y enfermedades mentales son insuficientes, por lo que destacó la necesidad de incrementarlos en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) de 2018. Durante el foro “Fortalecimiento de las instituciones de salud mental”, organizado por el grupo parlamentario del PRI, la legisladora indicó que de los recursos totales del sector salud, sólo el dos por ciento de éstos se destina para la atención de la salud mental. Señaló que en el país ha habido un incremento de la tasa de pacientes con problemas relacionados con trastornos mentales, por lo cual las instituciones públicas del sector presentan dificultades relacionadas con la falta de infraestructura y, además, no cuentan con recursos humanos ni personal capacitado. “En nuestro país, por cada 100 mil habitantes se registra una tasa de 1.5 psiquiatras, dos psicólogos, 2.3 enfermeras especializadas y 0.2 terapeutas. Nos señala claramente que el personal para procurar la salud mental es insuficiente”, apuntó. Asimismo, dijo que a nivel nacional se tiene registro de 46 hospitales psiquiátricos, tres unidades de internamiento en hospitales generales y ocho establecimientos residenciales, “evidenciando las dificultades de infraestructura para dar cobertura a esta problemática”. Por ese motivo, se comprometió a impulsar un incremento de recursos en el PEF de 2018, y buscará que se mejore el marco legal “para crear y eficientar las herramientas necesarias que logran reducir los índices de enfermedades y trastornos mentales en México”. “Cada año mueren en México cuatro mil 370 personas a causa de trastornos mentales, de los cuales, el 90 por ciento se vinculan con el consumo de drogas”, refirió. Lucía Amelia Ledezma Torres, especialista en neuropsicología del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), planteó un panorama general sobre las necesidades y requerimientos que las instituciones públicas de salud deben ofertar a pacientes. Entre ellas, indicó que se requiere capacitar a médicos y enfermeras, contratar más personal, invertir en tecnologías, adquirir fármacos de última generación, impulsar brigadas de prevención en las escuelas, considerar insertar en áreas de medicina preventiva programas de atención a trastornos mentales, e incluir terapias para personas con trastornos en etapas avanzadas como esquizofrenia y depresión. Guillermo Amaro Rangel, ex presidente de la Asociación Mexicana de Gerontología y Geriatría A.C., aseveró que en México poco se hace por la salud mental de la población de adultos mayores, debido a la dificultad que tienen para acceder a los servicios médicos especializados. “En los adultos, nos hace falta la prevención absoluta en todas las etapas de la vida y el autocuidado, para lograr tener en México una población que pueda, en unos años, envejecer con éxito en cuanto a la calidad de vida. No sólo se deben atender padecimientos físicos, pues poco hacemos por el estado mental de los viejos”, apuntó. Javier Zambrano Ramos, supervisor de hospitales psiquiátricos subrogados del ISSSTE, coincidió en que no existen camas suficientes en los hospitales públicos para el servicio de psiquiatría, por lo cual se debe capacitar a la familia del paciente a fin de prevenir las recaídas. Puntualizó que se necesita sensibilizar y capacitar constantemente al personal en todos los niveles de atención. Refirió que el médico general lo debe estar para enfrentar los padecimientos médicos comunes y los de tipo mental, debido a que es el primer contacto con el paciente. “También a los especialistas se les olvida que en algunos casos el padecimiento mental es el síntoma; muchos de estos padecimientos pueden ser consecuencia de una neuroinfección, una diabetes mal controlada, y los mandan a hospitales de tercer nivel sin atender las enfermedades detectadas en exámenes de laboratorio”, agregó. ERT/HSF |