• El diputado de MC plantea buscar un mecanismo que permita decirle a la ASF que entregue una mayor proporción de auditorías en el primer informe

Palacio Legislativo, 30-06-2022 (Notilegis).- Es necesario establecer un porcentaje para las entregas de los Informes Individuales de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública, así como que las auditorías tengan mayor profundidad en los entes fiscalizables, señaló el diputado Mario Alberto Rodríguez Carrillo (MC).

Lo anterior, en declaraciones a la prensa, luego de asistir a la primera entrega de Informes Individuales de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2021, realizada este jueves en la Cámara de Diputados.

El también secretario de la Comisión precisó que esta primera entrega sólo abarca 10 por ciento del total de las auditorías programadas a efectuarse por parte de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

El legislador planteó la necesidad de buscar un mecanismo que permita decirle a la ASF que entregue una mayor proporción de auditorías en el primer informe, establecer un parámetro que determine porcentajes mayores en cada entrega y además que sean de mejor calidad y profundidad.

“No queremos que haya más número de auditorías si no tienen profundidad, queremos auditorías completas, de calidad, sobre todo en proyectos mediáticos, es decir, donde necesitamos cumplimiento financiero; que se hagan de desempeño y que crucen los datos para ver si con esta profundidad se da mayor solvencia y transparencia”.

Del mismo modo, se requiere que las auditorías sean integrales y se incluya el cumplimiento de los objetivos con el desempeño financiero, “porque el número sigue diciendo poco”.

“Muchas veces el hacerlas por separado no nos permite darle esta profundidad que necesitamos. Hemos insistido en Movimiento Ciudadano que todos los proyectos que llevan grandes cantidades de recursos estén programados para que sean parte del Programa Anual de Auditorías”.

Por otro lado, abundó, en que hay otra problemática sobre las denuncias, que generalmente se presentan ante la ASF, pero no vienen bien sustentadas o fundamentadas, por lo tanto, no entran a la auditoría.

“La Comisión de Vigilancia puede fungir como ventanilla, pero no llegan muchas denuncias. Además, cuando ya hay una denuncia fundamentada y elementos de causa, han pasado a una cancha distinta, puede ser el tribunal administrativo o la fiscalía general”.

“Habrá que buscar cómo le hacemos para que se puedan articular bien esas denuncias y tengan la fortaleza para transitar al seno de la auditoría; la Comisión de Vigilancia puede entrarle al acompañamiento de estas denuncias, el problema es que casi nunca se acercan, se van directo a la auditoría”, concluyó.

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