Boletín N°. 2830 | Seis de cada diez adolescentes mantienen relaciones sin protección anticonceptiva |
• Del 2000 al 2013 el embarazo entre adolescentes aumentó 16.3 por ciento 18-01-2014 El diputado Ricardo Mejía Berdeja (Movimiento Ciudadano) afirmó que según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), seis de cada diez adolescentes que han tenido relaciones sexuales no utilizaron anticonceptivos durante su primer contacto. En este sentido, el legislador señaló que deben instrumentarse acciones para difundir información y orientación educativa entre adolescentes y jóvenes, a fin de explicar las complicaciones de salud y psicosociales durante y después del embarazo. Para ello, propone reformar el artículo 67 de la Ley General de Salud con el propósito de estipular en este ordenamiento jurídico, en el apartado de Servicios de Planificación Familiar, las complicaciones durante y después del embarazo en las adolescentes y su inconveniencia durante esta etapa de la vida. Subrayó que es de vital importancia atender a este sector de la población, ya que el embarazo en la adolescencia representa un factor de gran riesgo de morbilidad materna, fetal y neonatal, condicionado en gran medida por diversos factores biológicos, como la inmadurez física y emocional de la madre. La iniciativa turnada a la Comisión de Salud sostiene que hoy el embarazo en adolescentes constituye en México un problema de salud pública, que se da en un contexto de pobreza y falta de educación, lo cual ha contribuido, de acuerdo con el Consejo Nacional de Población, a que del año 2000 al 2013, los alumbramientos de madres entre 15 a 19 años aumentaran en 16.3 por ciento. Agregó que para disminuir estos índices se debe visualizar a la salud reproductiva de los adolescentes como un tema prioritario en el diseño de las políticas públicas en la materia, toda vez que datos de la Organización Mundial de la Salud establecen que las mujeres menores de 16 años corren un riesgo de defunción materna cuatro veces más alto que el de las de 20 a 30 años, y la tasa de mortalidad de sus neonatos es aproximadamente 50 por ciento superior. El diputado Mejía Berdeja destacó que los expertos en salud consideran que las adolescentes embarazadas requieren atención física y psicológica especial durante el embarazo, el parto y el puerperio para preservar su propia salud y la de los bebés. Añadió que se deben de reforzar los medios de prevención para el embarazo precoz, en particular entre las jóvenes marginadas y en los sistemas de salud donde el personal tendrá que brindar la asesoría a aquellas que llevan una vida sexualmente activa y que no quieren quedar embarazadas.
Planteó que el Estado establezca programas preventivos en materia de salud reproductiva, así como de educación sexual dirigidos a adolescentes para orientarlos, de manera integral, sobre los riesgos de salud que conlleva un embarazo precoz, así como las consecuencias a nivel psicosocial. |