El coordinador del PAN en la Cámara de Diputados, Marko Cortés, urgió al gobierno federal a impulsar una estrategia integral y conformar un frente común ante el difícil entorno internacional por el próximo cambio de administración en Estados Unidos.

Demandó propuestas claras y contundentes para que los poderes Ejecutivo y Legislativo establezcan las medidas preventivas necesarias para fortalecer y blindar los distintos sectores productivos de México frente a los nuevos retos.

Sostuvo que en el país se percibe hoy un clima de incertidumbre que, sin duda, repercutirá en la economía de las familias mexicanas, por lo que el problema no se puede minimizar.

"Exigimos que el gobierno federal presente un diagnóstico completo y con una visión integral, que presente soluciones claras y contundentes para que, antes de que el tiempo nos alcance, estemos preparados para hacer frente al difícil entorno internacional", puntualizó.

Cortés instó a la Secretaría de Hacienda a mantener una mejor comunicación y colaboración con el Banco de México, pues resulta inadmisible que en medio de una situación tan compleja para el país se presenten estimaciones distintas y señales contradictorias en cuanto a las expectativas de crecimiento.

"Por un lado tenemos un Banco de México advirtiendo los riesgos potenciales para la economía en el nuevo contexto internacional, pero por el otro Hacienda envía mensajes de optimismo frente a la realidad: estas diferencias en nada le sirven al país, es obligación del gobierno informar con veracidad sobre la situación que se vive", dijo el líder panista.

Marko Cortés remarcó, además, que en los últimos días se registra un aumento de la cotización del dólar frente al peso, del índice de precios al consumidor y del costo de la electricidad, entre otras variables, que son una señal de advertencia de que la economía mexicana se sigue debilitando.

Por lo que hace al Tratado de Libre Comercio (TLC), señaló que el grado de conectividad logrado entre México, Estados Unidos y Canadá ha permitido una gran integración, aunque ahora se pretende introducir una distorsión que tendrá un impacto muy fuerte en la competitividad alcanzada en la región norte de América.

Como ejemplo de ello indicó que, de cada dólar de las exportaciones automotrices de México a Estados Unidos, alrededor de 62.5 por ciento corresponde a productos o insumos de la región América del Norte, por lo que cualquier decisión que cambie las condiciones actuales incidirá sensiblemente en la economía de ambos países.

"En la región de América del Norte no nada más nos estamos vendiendo y comprando productos y servicios; ha habido un desarrollo y una tendencia de integración que compite con el mundo, de manera que tratar de desarmar eso, es ir en contra de la corriente de los últimos 25 años, y de ahí la necesidad de presentar una estrategia integral y para que ante el nuevo escenario internacional todos hagamos un frente común", advirtió. /jpc/m