El coordinador del PAN en la Cámara de Diputados, Marko Cortés, calificó de recesivo, omiso y discrecional el paquete económico para 2018 propuesto por el gobierno federal.

“Es el reflejo del fracaso de la reforma fiscal impulsada por el PRI y la deficiente política económica de este gobierno, que en promedio ha logrado un insuficiente crecimiento anual de 2 por ciento”, puntualizó.

Cortés anticipó que su fracción parlamentaria revisará con mucha atención el paquete económico, pero en principio cuestionó su carácter recesivo que no genera condiciones de crecimiento, no mejora el ingreso familiar, ni responde a las voces que demandaron corregir el rumbo de la economía.

Sostuvo que el proyecto de presupuesto mantiene intactos los márgenes de discrecionalidad en las reasignaciones y en el uso de los programas sociales.

Así, el último año del actual gobierno no será de austeridad y moderación, sino de derroche, para lo cual mantiene alta la tasa del IVA y conserva sin cambios en el impuesto especial sobre las gasolinas, a pesar de su impacto en la inflación y en el bolsillo de los mexicanos, dijo.

El líder parlamentario de Acción Nacional advirtió que, en materia de impuestos, el paquete económico es omiso ante el reclamo de la sociedad y de organizaciones como la Coparmex, pues no corrige los abusos de la “tóxica reforma fiscal”, como la eliminación de las deducciones a trabajadores y el aumento al ISR.

“Ante la inminente derrota del PRI en 2018, se ve mucho nerviosismo en los priistas, se han vuelto más intolerantes y agresivos que nunca; esperemos que en el último año del sexenio tengan la humildad para reconocer que se equivocaron y que esta vez sí tengan altura de miras para corregir, reactivar el crecimiento económico de México y que no se aferren a cometer los mismos errores”, afirmó.

Señaló que la bancada panista en el Palacio de San Lázaro mantendrá su lucha para echar atrás la reforma fiscal e insistirá en disminuir el ISR y el IVA en la zona fronteriza, así como en la deducción al cien por ciento de las prestaciones de los trabajadores.

Propondrá también de nueva cuenta la deducción de las aportaciones a los planes de pensiones, la deducción inmediata de inversiones y la reducción de 35 a 28 por ciento la tasa de los impuestos para personas físicas.

Cortés lamentó, sin embargo, que para la aprobación de la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos baste la mayoría simple de los votos que el PRI y sus aliados tienen en la Cámara de Diputados. /psg/m.