Desde hace varias décadas en México se registra una serie de “nuevas figuras” como prácticas sociales, relaciones de poder y sobre todo, como “constructores” de ciudadanía. Los síntomas son más que evidentes y pueden señalarse al menos dos casos: el narcotráfico y el asesinato de mujeres. Hasta ahora no se puede demostrar con claridad una relación entre ambos fenómenos. En ambos casos se trata de procesos de descomposición social, aceleración de la violencia y de toda seña de crueldad de un ser humano hacia otro. Si bien no es posible compararlos tampoco es posible separarlos.

La implementación de los 17 objetivos de la Agenda del Desarrollo Sustentable (SDG, por sus siglas en inglés) transformará nuestro planeta al prometer prosperidad junto con el cuidado del medio ambiente, asevera la Organización de las Naciones Unidas (ONU). La agenda fue suscrita en el marco de la Cumbre de la ONU en 2015 y entró en vigor el primero de enero del año siguiente. Los objetivos hacen que los países centren sus esfuerzos en la eliminación de la pobreza en todas sus formas y desigualdades, al mismo tiempo que se hace frente al cambio climático.

En los regímenes democráticos el Congreso es uno de los pilares de la legalidad, institucionalidad, pluralidad y representatividad ciudadana. En los países que experimentan procesos de transición y consolidación democrática, el Poder Legislativo es el garante fundamental de la estabilidad y la gobernabilidad.

La globalización económica ha acercado a los países y brindado a la población mundial acceso a bienes y servicios que antes no eran parte de sus patrones de consumo, sea en cantidad como en calidad. Ha permitido también, la entrada de nuevos flujos de inversiones directas capaces de generar fuentes de empleo con mejores salarios; ha posibilitado también acceso a escalas de conocimiento científico sin precedentes, así como a tecnologías digitales que ya son parte inseparable de nuestra vida cotidiana.

La política fiscal, como acción del Estado, busca el equilibrio entre lo recaudado por impuestos[1] y otros conceptos, y los gastos gubernamentales; es decir, se refiere a la programación eficaz de los ingresos y gastos públicos, así como la relación que guardan. Para ello, uno de los instrumentos más importantes con los que cuenta el gobierno federal es la política tributaria, reflejada en la Ley de Ingresos (LIF).[2]

[1] Según el Código Fiscal de la Federación, los impuestos son las prestaciones en dinero o en especie que el Estado fija unilateralmente y con carácter obligatorio a todos aquellos individuos cuya situación coincida con la que la ley señala. Tributo, carga fiscal o prestaciones en dinero y/o especie que fija la ley con carácter general y obligatorio a cargo de personas físicas y morales para cubrir los gastos públicos. Es una contribución o prestación pecuniaria de los particulares, que el Estado establece coactivamente con carácter definitivo y sin contrapartida alguna. Glosario de términos SHCP.

[2] Auditoria Superior de la Federación (2016). El Reto Fiscal y la Reforma Hacendaria.